Cuando un día una extraña luz emana del celular de Yuzuki y la envuelve por completo, la chica se ve transportada a un sitio desconocido. Al abrir los ojos se encuentra con un paisaje que le recuerda al Japón de la era Sengoku.
Pero no, no ha viajado en el tiempo. Está en un extraño mundo llamado “Shinga” en el que habitan criaturas no humanas como vampiros y hombres lobo.
Hace mucho tiempo, las varias tribus de Shinga convivían en paz bajo la protección de la Himemiko, una sacerdotisa que poseía una sangre especial. Todo eso cambió el día que la Himemiko desapareció de repente en misteriosas circunstancias.
Sin la protección de la Himemiko, el mundo ha entrado en una era en la que los varios señores de la guerra de las tribus Gegga batallan sin cesar entre ellos en pos del mayor control posible. Por si eso fuera poco, el caos parece provocar la aparición de unos extraños monstruos llamados Yakuma que vagan por todo el mundo atacando a cualquiera con quien se encuentren.
Hideyoshi Toyotomi, líder del ejército de los Toyotomi, salva a Yuzuki del campo de batalla y la lleva con él, descubriendo accidentalmente que la sangre de la chica parece despertar los poderes latentes de las tribus Gegga.
Cuando se extiende el rumor sobre el poder que alberga la sangre de Yuzuki, el resto de señores de la guerra (Oda, Uesugi, Takeda, Sanada y Date) comienzan a perseguirla para aprovechar sus habilidades en su propio beneficio.
“Encuentra a la chica de otro mundo”. Esas fueron las últimas palabras que la Himemiko pronunció a Imari, un tanuki blanco. Mientras los Yakumo comienzan a aparecer en cada vez mayores números y los señores de la guerra se ven afectados por el poder de Yuzuki, estos comienzan a preguntarse qué deben proteger realmente y contra quién deben luchar. Así da inicio una nueva historia que se desplegará en mitad de una guerra en marcha en otro mundo…
Se ve interesante, la llevo.