Este software está diseñado para ayudarlo a monitorear los componentes de hardware del sistema y le permite overclockearlos. Proporciona herramientas de prueba para la CPU (pruebas de referencia OCCT y LINPACK), la tarjeta gráfica y la fuente de alimentación.

La interfaz es intuitiva y consta de dos paneles, uno que incluye la sección ‘Monitoreo’ y el otro que muestra las pruebas disponibles.

En su ventana principal, OCCT muestra información detallada sobre sus dispositivos de hardware, como la CPU y la placa base. Además, hay una tabla donde puede ver las frecuencias de bus y CPU actuales y overclockeadas.

La CPU y el uso de la memoria se controlan constantemente y los valores se muestran en un gráfico dinámico. Por defecto, el programa usa HWMonitor para generarlos, pero también ofrece soporte de software de monitoreo de terceros, como AIDA64, siempre que los tenga instalados en su PC.

Independientemente de la prueba que decida elegir, el overclocking se puede activar o detener fácilmente en cualquier momento que desee. Antes de comenzar, el usuario tiene la posibilidad de seleccionar el tipo de prueba (infinita o automática), configurar su duración y períodos de inactividad, así como otros parámetros, dependiendo del dispositivo de hardware seleccionado.

Por ejemplo, la prueba LINPACK le permite elegir el porcentaje de memoria, mientras que elegir la prueba GPU le permite personalizar la resolución y el límite de FPS.

Una vez que se inicia la prueba seleccionada, puede ver inmediatamente los efectos en su CPU y el gráfico de uso de memoria, así como los nuevos valores para la frecuencia de la CPU.

En cualquier caso, donde Sublime Text brilla es en la cantidad y calidad de sus prestaciones, entre las que podemos encontrar algunas tan interesantes como la multi selección, el multi cursor y el multi layout, gracias a las que podremos editar mucho más fácilmente (y sobre todo rápidamente) cualquier código.

Muy interesante también resulta el gran soporte nativo que tiene para diferentes lenguajes, como Clojure, Perl, Javascript, Haskell, Erlango o Escala entre otros. Además, podemos crear y guardar macros en cualquier momento para que nos faciliten aún más el trabajo, contando con montones de posibilidades para ello.

El hecho de poder configurar todos los atajos de teclado que queramos tampoco está nada mal, ya que una vez tengamos creado nuestro propio estilo, llevar a cabo cualquier acción que en otros programas nos podía llevar casi un minuto, en Sublime Text apenas costará unos segundos.

Sublime Text es una herramienta de edición de texto completísima, que encandilará a todos aquellos usuarios que trabajen con este tipo de programas de manera habitual.

Arrastra y suelta los ficheros sobre el panel correspondiente. Q Dir cuenta con un sistema de favoritos para acceder de forma rápida a las ubicaciones que indiques. También se puede filtrar el contenido de los paneles para facilitar la localización de un recurso determinado.

Q Dir incluye, además, una lupa con la que puedes ampliar cualquier parte de la interfaz del programa y puede exportar los listados de archivos a varios formatos, entre ellos: TXT, HTML, CSV o XLS.