El juego se desarrolla en un enorme mundo abierto en la línea de la mencionada franquicia The Elder Scrolls, por el que los jugadores podrán campar a sus anchas, combatiendo contra multitud de enemigos diferentes, participando en decenas de misiones secundarias distintas, hablando con muchos personajes únicos y recogiendo centenares de objetos con los que personalizar a nuestro héroe.

Para movernos por este vasto mundo tendremos varias opciones. La más habitual, claro, será ir a pie; pero no es la única. También podremos ir a caballo o utilizar diferentes monturas (incluso voladoras) desde las que podremos combatir.

Algunas de las mecánicas adicionales que encontraremos dentro del juego incluyen sistemas de forzar cerraduras, robar bolsillos de otros personajes… e incluso entrar y salir de prisión si nos pillan haciendo cualquiera de estas actividades.

El sistema de combate del juego, si bien no está totalmente pulido, es bastante bueno. Cuando utilicemos armas de cuerpo a cuerpo, como espadas, martillos o hachas, el juego permanecerá en tercera persona; mientras que se cambiará a una vista en primera persona al usar arcos y ballestas.

Gráficamente Ravensword: Shadowlands es un título impresionante. Debido a este apartado gráfico, más propio de un ordenador de sobremesa que de un teléfono móvil Android, tan solo los terminales más potentes podrán mover el juego.

Ravensword: Shadowlands es uno de los mejores juegos de rol que podemos encontrar en Google Play. Un auténtico ‘triple A’ para teléfonos móviles que puede llegar a brindarnos un centenera de horas de juego y ahora en PC.